martes, marzo 21, 2006

Francia: los estudiantes coparon otra vez las calles para rechazar el polémico contrato de empleo

Los universitarios comenzaron hoy su plan de lucha en varias ciudades de Francia con protestas y bloqueos de cientos de establecimientos públicos. Miles de manifestantes ganaron las calles para protestar contra la aplicación del controvertido contrato laboral destinado a los menores de 26 años que permite al empleador despedir a los jóvenes sin causa justificada durante los dos primeros años.

La principal federación de estudiantes de secundaria, la FIDL, afirmó que la cuarta parte de los 4.370 centros de este tipo estaban bloqueados por opositores al llamado Contrato Primer empleo (CPE). La lucha promete ser larga: huelga general para el próximo martes y más marchas el jueves en París. A los universitarios se les suman los asalariados que irán directamente a la huelga general al igual que los ferrocarriles. Los privados pararán en sus lugares de trabajo.

La tensión social promete crecer con el correr de los días ante el estrecho margen de salida al conflicto. Sucede que los universitarios exigen el retiro inmediato del CPE como única solución mientras que el gobierno de Chirac promueve tibias reformas en el contrato. En tanto, el ministro De Villepin multiplica sus ofertas de diálogo sin ceder. Un tire y afloje en que ninguna de las partes quiere dar el brazo a torcer.

En el departamento de Seine-Saint-Denis, un suburbio cercano a París, donde estallaron los disturbios de noviembre, 25 de los 64 institutos públicos no funcionaban con normalidad y 8 de ellos fueron cerrados por precaución, según las autoridades locales. En la localidad de Drancy se registraron enfrentamientos entre grupos de jóvenes y policías antidisturbios, un aumento de la violencia que ha suscitado gran inquietud entre las autoridades.

Inquietud que se ve reflejada en por estas horas en la suerte que corre uno de los sindicalistas que se encuentra muy grave por las heridas recibidas en el cráneo en la represión policial en plaza de la Nación, en los disturbios al final de la marcha del sábado. El último parte médico del hospital público Henri-Mondor indicó que "los numerosos traumatismos lo sumieron en un coma profundo. El estado neurológico, vital y funcional de Ferez es sumamente reservado". El miedo a un muerto es el gran temor desde que se iniciaron las manifestaciones contra el CPE.

En otra ciudad próxima a París, Savigny-sur-Orge, hubo enfrentamientos entre cientos de estudiantes y agentes de las fuerzas del orden. En la capital, 28 de los 110 centros de secundaria (el doble que la víspera) estaban afectados por la movilización juvenil y la mitad de las universidades seguían bloqueadas o no funcionaban con normalidad.

ecoestadistica.com